ICT services, Supply Chain, Emergency Management – Scopri di più sul blog di Beta 80

Optimización de existencias: cómo gestionar las existencias para el omnicanal en la gran distribución

Escrito por SUPPLY CHAIN & WAREHOUSE MANAGEMENT | 13 mayo 2025

En el sector de la gran distribución, el canal de venta preferido por los consumidores ha sido siempre la tienda física. Sin embargo, en los últimos años, la compra online se ha ido imponiendo progresivamente también en este sector: una investigación de McKinsey sobre el mercado europeo estima, de hecho, una tasa de crecimiento agregada (CAGR) del e-grocery en el periodo 2019-2030 del 6,8% interanual, frente al 2,0% del offline. El escenario se hace aún más complejo por la difusión de la omnicanalidad y, por lo tanto, la presencia de modelos híbridos de compra online/offline, como ship from store, click&collect, order in store o dark store: servicios al cliente y métodos de distribución que requieren técnicas de reposición dedicadas. Por lo tanto, las empresas minoristas tienen que identificar los mejores métodos para optimizar las existencias y garantizar la disponibilidad de los productos en una amplia variedad de canales de venta, asegurando tanto el servicio al cliente como el beneficio de la empresa. 

 

Omnicanalidad en la gran distribución: ¿cuáles son los retos? 

Una característica distintiva de la gran distribución, en comparación con otros operadores minoristas, es la variedad del surtido. Cuanto más amplio es el catálogo de productos, mayor es la posibilidad de atraer clientes, tanto en la web como en la tienda. Sin embargo, aunque la ampliación del surtido es crucial para el negocio minorista, hay que tener en cuenta los retos que ello conlleva en toda la cadena de suministro: 

  • Planificación de la producción: las líneas de producción y distribución en los distintos centros logísticos deben calcularse estableciendo el mejor trade-off entre capacidad de almacenamiento, tiempo de transporte y surtido de los distintos puntos de venta. 

  • Estrategias de asignación: la multiplicidad y diversidad de funcionamiento de los distintos canales de la gran distribución exige que la asignación de productos a los puntos de distribución y venta se haga en función de las necesidades específicas de cada tienda o centro. 

  • Sincronización de las operaciones: durante el proceso de compra, la «experiencia del cliente omnicanal» está sustancialmente condicionada por la coherencia y la fluidez de las transiciones entre online y offline. La experiencia en la tienda debe continuar en el sitio web y viceversa, sin fisuras. Esto implica garantizar una disponibilidad equilibrada de los productos: las existencias de los almacenes dedicados a los distintos canales de distribución deben estar alineadas y las operaciones sincronizadas. 

La gestión del inventario y la optimización de las existencias se convierten así en elementos esenciales para apoyar la venta minorista omnicanal. El método jerárquico tradicional, según el cual una estimación previa de las necesidades de surtido define estáticamente la producción y el almacenamiento, ya no puede funcionar, porque el mercado fluctúa y la red de distribución está demasiado articulada. Es necesario identificar un método eficaz para gestionar el inventario, establecer umbrales mínimos y máximos y garantizar la reposición de existencias. 

Gestión óptima de las existencias: aquí está la solución 

En todos los nodos de la red de distribución donde está presente la gestión de existencias (centro logístico, dark store, etc.), hay que implantar un sistema dinámico y no estático de gestión del surtido, apoyándose en diferentes métodos y tecnologías: 

  1. Análisis predictivo. Los algoritmos de Artificial Intelligence y Machine Learning permiten calcular y predecir las necesidades del mercado y, en consecuencia, la asignación de productos. El análisis predictivo presupone la existencia de una base de datos histórica de ventas y de procesos normalizados de recogida y normalización de datos de los puntos de venta y distribución. La disponibilidad de información constantemente actualizada permite una gestión óptima de las existencias.  

  2. Dynamic Replenishment (reposición dinámica). Se trata de un enfoque dinámico de la gestión de existencias en el que los mecanismos de reposición de existencias tienen lugar sobre una base variable, con umbrales mínimos y máximos actualizados en tiempo real. Los algoritmos de cálculo tienen en cuenta no sólo las existencias y la demanda existentes, sino también, por ejemplo, el plazo de entrega (cuánto tiempo transcurre entre la orden de reposición y la llegada de la mercancía al almacén), o el nivel de servicio esperado por el cliente final. 

  3. Gestión de existencias . La disponibilidad de existencias en el almacén debe actualizarse en tiempo real, con cada operación de picking o de almacenamiento. Para ello, el cálculo por parte del WMS - Warehouse Management System, puede realizarse, por ejemplo, mediante métodos JIT - Just In Time o mediante inventario rotativo. 

Además, la eficacia operativa del propio almacén marca la diferencia. En el centro logístico pueden aplicarse diversas estrategias que mejoran notablemente el rendimiento operativo y acortan el tiempo entre el pedido del cliente y la entrega del producto. Cuanto más rápido se cumpla el pedido, más preciso será el cálculo de la reposición. Tales estrategias son, por ejemplo, el uso de sistemas automatizados para acelerar la preparación de pedidos y la formación de pedidos; el almacenamiento de productos en función de la frecuencia de picking (análisis ABC); la categorización de artículos según familias de productos, etc. 

La omnicanalidad en la gran distribución es un ecosistema complejo en el que interactúan múltiples factores, cada uno de ellos decisivo para responder a las expectativas de los clientes: amplitud del catálogo, compra híbrida, disponibilidad de los productos, variabilidad de la demanda, capilaridad de la red logística, etc. En este contexto, es imperativo para las empresas establecer una cadena de suministro capaz de responder a las necesidades del mercado y reaprovisionar los almacenes de forma dinámica, en función de la demanda. El Dynamic Replenishment y la gestión óptima de las existencias de los almacenes son requisitos fundamentales, sin los cuales no será posible que los grandes minoristas garanticen una verdadera omnicanalidad, es decir, que ofrezcan una experiencia de compra fluida, tanto online como offline.